Se ha demostrado que la mayoría desperdiciamos nuestras horas de trabajo simplemente porque no tenemos buenos hábitos de productividad. Te dejamos 5 pasos que pueden ayudarte a optimizar tu trabajo.

1. Fíjate objetivos diarios. Dedica, al menos, los primeros 15 minutos de trabajo del día a establecer tu plan de objetivos diarios o tareas. Deber ser medibles y alcanzables.

2. Asigna un tiempo a cada tarea: El éxito está en asignar tiempos a cada tarea y cumplirlos. Por ejemplo: las llamadas telefónicas de 09:00 a 10:00.

3. Define las horas del día en que sueles ser más productivo: Concentra en ese tiempo a avanzar la mayor cantidad de trabajo pendiente.

4. Empieza por las tareas más complejas: Si hay algo que le viene bien a nuestro cerebro es realizar rápido las tareas que más te quitan el sueño.

5. Transforma el desorden en orden: Ordena tu escritorio, la información de tu computador o tu entorno de trabajo. Te dará no solo un orden visual sino mental.

6. Al final de la jornada, trata de desconectarte del trabajo, dedícate tiempo a ti y trata de dormir al menos 8 horas.

Recuerda que la planificación, la ejecución, la disciplina, el orden y el relax en ciertos momentos del día son claves para mejorar tu productividad.

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